viernes, 22 de agosto de 2008

PORNOGRAFÍA VS. ARTE.


Leo en el diario "Levante" que van a pasar en la "Filmoteca d´Estiu" la película "Querelle", del director alemán R.W. Fassbinder. Lo curioso, según el artículo, es que este film se estrenó en Valencia (que es la ciudad donde vivo por si hay algún despistado) en una sala X. A continuación hace referencia a que el resto de grandes obras de Fassbinder se presentaron en su día en salas de Arte y Ensayo, incluso con cierto éxito de público. Conclusión: ¿se restringió "Querelle" al circuito marginal de las salas para pajilleros por su alto contenido sexual (homosexual para más señas)? Probablemente. Y he aquí la cuestión que genera el debate.
Parece que cualquier representación explícita (o semiexplícita) de las relaciones sexuales conlleva inmediatamente la reacción negativa de crítica y público. De este modo, aquellos artistas cuyas manifestaciones incluyen dichos elementos, provocan en general airadas reacciones en contra.Pero no por su calidad como creadores, sino por atreverse a enseñarnos algo tan esencial en el comportamiento humano como es el sexo. Evidentemente, no toda la pornografía es Arte, pero el prejuzgar con la despectiva expresión "ésto es pornografía", aunque sea la respuesta más fácil, quizás sea también la menos reflexiva. Y es que si las obras de artistas como Koons o Mapplethorpe (donde la genitalidad está presente) aún provocan comentarios despectivos, eso significa que aún hay un largo camino por recorrer.
Que en este país llevamos 40 años de retraso respecto al resto de Europa es un hecho en el que parece que todos estamos de acuerdo. Pero que después de 30 de democracia aún arrastremos traumas de la educación nacional-católica no parece tan claro. Y no es por quitar responsabilidad a la conservadora influencia que sigue ejerciendo la Iglesia oficial en todos los ámbitos, pero ya va siendo hora de que el personal (y ya me estoy refiriendo a los que se dedican profesionalmente a descalificar el esfuerzo de mucha gente) abra los ojos de una vez y vea. Porqué quizás estén todos equivocados, y puede que "El diablo en Miss Jones" sea tan respetable en tanto obra de Arte que "Ciudadano Kane", pero además con la ventaja de que su visionado puede ayudarnos en la liberadora tarea de provocarnos un buen orgasmo.
En este orden de cosas, y a mi entender, hay que caminar con paso lento pero firme hacia la desmitificación y la normalización. Es decir, que la imagen sexual deje de ser transgresión y pueda pasar a convertirse per se en objeto de belleza. Ese paso previo sería el preludio, sin duda, a la necesaria y progresiva extirpación de nuestro inconsciente colectivo de ese nefasto y castrador concepto judeocristiano llamado pecado.
Hay, sin embargo, otra rama del árbol llamado pornografía que también provoca controversia: La violencia. Asociada indisolublemente al mismo concepto, es públicamente aceptada de modo mayoritario por todos los medios, pero en especial por los audiovisuales (cine y televisión). Paradojicamente, y al contrario que el sexo, su significado último tiene más que ver con el fin de nuestras vidas que con el principio (aunque al fin y a la postre Eros y Tánatos forman parte del mismo ciclo natural). El hecho de que su representación pueda ser considerada Arte o no ya sería tema para otro post.




6 comentarios:

Carlos Castedo dijo...

No sabía que Querelle se estrenó en un cine X, me parece lamentable, pero así impidieron que la vieran tanto cinéfilos como pornófilos, que se largarían en seguida. Claro que también hay cinéfilos pornófilos, a esos nos les importaría.
No he visto El diablo... pero aunque ha estado unos años entre las 1.000 mejores de la historia según la mejor lista existente (a mi juicio), dudo que se acerque a Ciudadano Kane, ahí taspasao.
Por otra parte, dudo que veamos la separación real entre iglesia y estado y muchos menos el olvido de la doctrina de los pecados de la carne que empezó con San Agustín y sigue y sigue y sigue...

SALVATRON dijo...

No he dicho que "El Diablo..." sea mejor ni que ni siquiera se acerque, sino que a lo mejor la gente debería replantearse ciertos conceptos entorno a la definición del Arte.
Por cierto, te la recomiendo encarecidamente (ya sabes que la mula es infalible). Aunque eso sí, avisa a tu Amparo antes porqué a lo mejor no le va mucho lo del porno de "arte y ensayo".

Álvaro Pons dijo...

Si no recuerdo mal, Querelle no se estrenó en un cine x, sino clasificada 'S', que era la indicación que se utilizaba antes de la X para indicar que eran películas que "podía herir la sensibilidad del espectador" (por cierto, una de las S más curiosas fue la primera Mad Max, que se estrenó con la S).

SALVATRON dijo...

Bueno, la verdad es que a mi también me ha chocado cuando he leído la referencia en el Levante (para más señas en el del 22 de agosto). Según el autor del artículo , R. Ventura Melià, se estrenó el año 1982 (no pone mes) en la sala X de la calle Cuenca.
Por cierto, si que es curioso lo de "Mad Max".

SALVATRON dijo...

Jodo! Que razón tienes Álvaro. Menuda metedura del pata del amigo Rafael Ventura.

Anónimo dijo...

Como diría el Sardá, Eros, Tánatos y su puta madre...