miércoles, 20 de agosto de 2008

VERANO PSICOTRÓNICO.

Definitivamente de vuelta a la rutina y a los madrugones (hay que ganarse el pan). Y el veranito me ha cundido cinefágicamente hablando. Pelis de artes marciales, explotations italianas de zombies o robotitos entrañables animados han ayudado a sobrellevar los calores estivales (y algún que otro chapuzón, por supuesto). De "Wall-E" ya hablé en mi post anterior, así que no voy a repetirme. Sin embargo, no me resisto a comentar algunas delicias setenteras que nunca nombrarían en "Cahiers du Cinema".

La primera perla es una descarada copia de los muertos vivientes de Romero (de hecho uno de sus títulos fue "Zombi 2"), perpetrada en 1979 por el genio del spaghetti-mal rollo, Don Lucio Fulci. Estrenada en nuestras salas como "Nueva York bajo el terror de los zombies", la verdad es que de la ciudad de los rascacielos se ve bien poco, pues la acción transcurre casi exclusivamente en una isla del Caribe. Buenos efectos especiales, en la línea de todos los films del creador de "El Más Allá", con unos zombies de origen Woodoo que harán las delicias de los aficionados a los higadillos. Buen ritmo, actuaciones aceptables y atmósferas malsanas con buenas dosis de gore. Una auténtica gozada para ver, preferentemente, bajo los efectos de algún psicotrópico.
Escena bizarra: el combate bajo el agua entre un tiburón y un zombi.





Uiiisss!





Continuamos con una chulada de la factoría "Shaw Brothers". El clásico "Heroes of the Est" se tradujo aquí con el impagable título de "El paraíso del Kung-Fu-shaolin contra ninja" (y a mí que me recuerda al nombre de una pollería). Dirigida por Chia-Liang Liu, un habitual en las producciones Shaw, la película nos ofrece un catálogo de coreografías cuyo mayor aliciente, aparte de las habilidades de su protagonista Gordon Liu, es el enfrentamiento a causa de un malentendido, entre las diferentes artes marciales chinas y japonesas (y anda que no hay). Imprescindible para los aficionados al género.
Escena cachonda: el prota intentando aprender la técnica del mono borracho sobre la marcha.




Sígueme si puedes. Hip!





Hala. Otro día cuento algo sobre la colección pelis de Sonny Chiba (que "cool" que es el jodío. No me extraña que Tarantino esté flipado con este japo con cara de mala leche) que me estoy metiendo entre pecho y espalda, porqué no tiene desperdicio.

2 comentarios:

Carlos Castedo dijo...

Salvatrón, ingenuo de mí, he pensado ¿es posible que haya visto estas lindezas mi amigo Salva?, luego he recapacitado -una milésima- y estoy seguro de que sí. Cuánta broza y cuánto frikismo.
Ah, lo de la traducción de los títulos tiene delito.

SALVATRON dijo...

En efestos Charly. Lo de la cinefagia es ésto, tragarse absolutamente todo lo que se te pone por delante. Y ahora con el Emule ya pa qué te voy a contar.
Y lo de los títulos no es que tenga delito, es que en algunos casos es de pena capital. Eso sí, te jartas de reir.